Calidad en los Productos Colombianos, ¿La Tienen?
Enero 21, 2016
Normalmente no nos percatamos del lugar de origen de las prendas y productos que compramos si encajan con el perfil y gusto que buscamos. ¿Cuántas veces nuestras prendas u objetos dicen "Made in: China, Tokio, Taiwan, Japó"? Y ¿cuántas otras dicen: "Made in Colombia"? Creo hemos visto escasamente esta última. A continuación te damos
razones suficientes para que decidas comprar lo hecho en tu propio país.
El mundo del comercio se rige bajo el principio de la oferta y la demanda, a mayor número de consumidores mayor es la oferta; es decir que cada vez que compramos algún bien estamos promoviendo el funcionamiento de la economía en el país.
¿Qué Ocurre Cuando no Consumimos?
La demanda disminuye, por lo que la oferta también y entran en juego estrategias, por parte de los almacenes, para crear en el usuario una nueva necesidad, o motivarlo al consumo por
precios inferiores. Bajo esta dinámica aumentan las ofertas laborales y las compañías logran ampliarse.
¿Qué Pasa Aquí en Colombia?
Tenemos una cultura tendenciosa al consumo por gusto y durabilidad, donde
se cree que los productos internacionales son aquellos de la mejor calidad. ¿No será viable considerar, que si existe
inversión en la producción interna, existirían fondos más apropiados para perfeccionar la técnica y la calidad de la manufactura?
Relacionado y comprometido por promover las mercancías nacionales, desde hace 5 años el
Ministerio de Comercio, Industria y Turismo trabaja con Propaís promoviendo el
consumo de servicios y productos nacionales, bajo el lema "Compre colombiano".
Según María Lucía Castrillón, gerente de Propaís,
su principal función es la generación de políticas que apoyen al micro empresario y empresario nacional en cada etapa de la cadena de producción. Esta función tiene razones más profundas que motivos puramente "nacionalistas", entre ellas encontramos:
Primero, la industria colombiana tiene un
compromiso profundo con la certificación de calidad, ya que les permite ser competitivos a nivel nacional e internacional, por lo que tienen (muy por encima de otras marcas)
mejores características en calidad de materiales, durabilidad y técnica.
Segundo, mantenemos un balance entre oferta- demanda, favoreciendo la adquisición de empleo a nacionales. Si promovemos las empresas y micro- empresas consumiendo sus productos, estas podrán
crecer y a su vez permitir que se mantenga la dinámica de adquisición de empleos. No es cerrarse a las
empresas internacionales, sino darle cabida también a nuestra industria nacional.
En relación con lo anterior, el tercer punto es el desarrollo del país, dado como fruto del
crecimiento industrial. Si se consumen más productos nacionales, estos pueden adquirir la calidad de productos internacionales, apoyando las exportaciones, el crecimiento del PIB y el capital nacional por medio de los compromisos tributarios.
Estos compromisos
favorecen los ingresos para muchos otros proyectos de carácter nacional. Si apoyamos el crecimiento de la empresa extranjera, ¿por qué no apoyar la producción nacional?
Finalmente, encontramos que la producción nacional mantiene una ventaja sobre la internacional:
el valor del dólar. Si bien las empresas internacionales ofrecen precios variables con su capacidad de cambio del dinero extranjero;
la producción nacional puede ofrecer precios consistentes y acordes al poder adquisitivo de los colombianos.
Adicionalmente,
no se verían afectados por las fluctuaciones del dólar, por lo que pueden ofrecer valores competitivos al mercado, siendo más favorables e igual (o mejor) de buenos.
Ahora, si eres comprador, detente, piénsalo y apoya al (micro) empresario nacional para favorecer el crecimiento de tu país y la economía del mismo lugar.
Si eres comerciante y deseas beneficiarte, no dudes en comunicarte con
Propaís por medio de su página web, para obtener una cita, asesoramiento y apoyo en la promoción y fortalecimiento de tu negocio.
